El turismo sexual infantil crece a un
ritmo alarmante y se ha
convertido en el negocio
más cotizado para los explotadores que ganan hasta 400 soles por noche.
Esta perversa modalidad de turismo
promueve la prostitución y la pornografía
infantil.
Los niñas entre 10 y
14 años son las víctimas preferidas de los abusadores sexuales.
Las redes de explotación brindan
paquetes turísticos a través de internet o contratan
a personas en hoteles y
restaurantes para ofrecer
a “Las chiquitas” como
mercadería.
La mayoría de menores
sexualmente explotados provienen de lugares alejados, donde abunda la pobreza y la
mayoría son maltratados en sus hogares.
El sector donde más
menores prestan servicios sexuales es el Cercado de Lima después de San Juan de
Lurigancho.
¿QUIERES SER MODELO?
Las escolares entre 12 y 17 años
son las víctimas predilectas de explotadores sexuales que provistos de engaños
las introducen a redes de prostitución.
La artimaña más común son las ofertas
de trabajo de modelaje
Los explotadores se amparan en las
redes sociales como Facebook y Twitter
para captar a las estudiantes.
Si su menor hija presenta
inestabilidad emocional y depresión, ¡cuidado!,
puede ser víctima de explotación sexual.
Dos de cada tres niñas víctimas de
explotación sexual fueron agredidas físicamente por sus familiares.
Los embarazos no deseados después de
las enfermedades de transmisión sexual son la principal consecuencia de la
prostitución infantil.
GOOGLE EN CONTRA DE LA PORNOGRAFÍA
Google anunció medidas para reducir
uno de los contenidos más perversos que abundan en la red: la pornografía
infantil.
El presidente del directorio de
Google, Eric Schmidt, afirmó que
implementará nuevas medidas para bloquear de su buscador la pornografía
infantil.
Schmidt aisló las medidas en
diferentes categorías, entre las que se incluye eliminar de Google términos que
puedan entregar como resultado pornografía infantil.
Otras de las medidas será alertar por
intermedio de advertencias en los resultados de la búsqueda de palabras que
estén relacionados con la pornografía.
Por último, el actual presidente del
directorio de Google ha
decidido asesorar a diferentes organizaciones no gubernamentales que
luchan contra la explotación infantil en internet.
La difusión pornográfica de un menor a
través de internet puede producir efectos devastadores
para las víctimas.
LAGRIMAS AMARGAS
Belén, una niña norteña de 17 años, se
estremece al recordar que tuvo que ser obligada
a vender su cuerpo por un proxeneta.
Las rosas, los peluches y los chocolates
de un estudiante de administración de 20 años fue lo que convencieron a Belén para salir
de su hogar en Piura y mudarse a Lima, luego de
conocerse por tres semanas.
“Juan era una persona muy tierna. Nos
conocimos por medio de la internet y
decidimos salir, él me decía que siempre me iba a
cuidar. Yo creí ciegamente en él, a pesar de conocerlo poco me hacía sentir
segura, hasta que llegamos a Lima”, manifestó la menor de edad con los ojos
humedecidos.
El hombre abusó
sexualmente de ella al llegar a Lima y la obligó a prostituirse junto
a un grupo de niñas y adolescentes.
Caminar por las noches con una falda
corta por la avenida Torre Paz en San Juan de Miraflores fueron su condena
por tres años, que se le hacían interminables
No tenía descanso, día y noche
tenía que trabajar con
su cuerpo para quién pagara por ella y si se negaba la amenazaban con la
muerte.
“Pasé por cosas
horribles. Aguantar a esos hombres que me humillaban
y amenazaban para satisfacer todos sus deseos. Yo me sentía la más
infeliz del mundo”, haciendo un gesto de
profunda pena.
“Uno de los clientes, fue un
policía, sacó su placa y me la enseñó. Me dijo que no tuviera
miedo, que él nunca iba hacerme nada malo. Entonces no sabía sus
intenciones, pero por suerte me rescató”, reveló con un suspiro y secándose las
lágrimas.
Belén junto a tres niñas fueron
rescatadas del perverso mundo de la explotación sexual por un policía
disfrazado de cliente
NÚMEROS QUE ASUSTAN
- Ocho de cada 10 víctimas del delito de trata de personas son adolescentes entre los 13 y 17 años.
- La desaparición de menores ha crecido en forma muy alarmante en nuestro país.
- Lima se ha convertido en el principal foco de víctimas de trata de personas.
- La pérdida de valores ha generado que estos traficantes lleguen a convertir a muchos niños en mercancías sexuales para satisfacer sus deseos y beneficiarse económicamente con su explotación.
- Las víctimas de explotación sexual comercial son obligadas a prostituirse en bares, clubes nocturnos y discotecas, bajo la fachada de negocios legales.
- Los niños explotados sexualmente han sufrido de maltrato físico y psicológico por parte de sus explotadores.
- San Juan de Miraflores se ha convertido en el principal centro de explotación comercial infantil en Lima, seguido de Cercado de Lima.
LO
QUE USTED NO QUIERE SABER
- Uno de cada dos niños que duerme en las calles de Lima es explotado sexualmente por redes de tráfico de personas.
- La prostitución es el tipo de explotación sexual infantil más practicada seguida de la pornografía.
- Las niñas de entre los 13 y 14 años son las preferidas por estas mafias y clientes de servicios sexuales.
- Las zonas más pobres de Lima se han convertido en el punto estratégico de exprostitutas que con engaños buscan a niñas desprotegidas para ser parte del negocio más sucio del mundo.
- Con la excusa de un trabajo llevan a las menores a sus centros de operación donde bajo la fachada de clubes nocturnos y hoteles son entregados a un proxeneta.
- Los dueños de hoteles, seguido de taxistas son los principales cómplices de este delito.
- La mayoría de las víctimas son violadas, golpeadas y luego drogadas por su victimario antes de empezar a atender a los clientes.
- La razón más frecuente por la que estas menores son obligadas a drogarse es para que sean dóciles con el proxeneta y su cliente.
- La muerte detrás de la drogadicción es el triste desenlace de estas niñas, muy pocas logran huir o ser rescatadas por alguna autoridad.
- La sobredosis es la primera causa de la muerte de los menores explotados sexualmente seguido del asesinato por sufrir de enfermedades de transmisión sexual.
Estefany Mendoza Vargas
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